Gracias por la música



Era un chico de pueblo, con un don que le venía grande.
Una chaqueta de lana con olor a humo, heroína y orina.
Espantapájaros adicto, doblado por un dolor
que no le dejó hacer regalos ni morir.

Ahora que reconozco tu letra, te respeto menos.
Estar cerca de un gran hombre es manosear un grabado a diario.
A la larga, papel sucio y leyendas de lo que fue.

Y la ingratitud conlleva Tourette en el alma.
Agradecemos tu preocupación, y amamos lo que no eras.
Yo tampoco soy especial, violémonos.
Tu hija tendrá su venganza a través del punk-rock.
Sé que nos miras desde un lago de fuego.
Sentimientos de pescado muerto, de frías perlas.

Creo que a ratos te entiendo.
Gracias por la música.
Y nada más.

No hay comentarios: